El presidente de Pauny SA, Raúl Giai Levra, dijo que “desde mayo pasado las expectativas de ventas mejoraron y esperan superar lo esperado, con la venta de alrededor de dos mil tractores”, aunque reconoció que “hay inconvenientes por la pandemia con entrega de insumos y por el personal en aislamiento”.
El titular de la empresa adelantó en una entrevista con El Heraldo, que “todavía no está decidido” si cierran el mes de enero como habitualmente lo hacían indicando que no está el contexto para retrasarse con las entregas o rechazar trabajos.
También, vale remarcar, tuvo palabras elogiosas y afectuosas hacia la figura de Luis Zanello, recientemente fallecido: “Era un hacedor y se merece el homenaje de la gente y que el Parque Industrial lleve su nombre”, afirmó.
“Iniciamos el año donde ya veníamos, con una situación difícil dos años anteriores malos para el sector. A partir de la primera y única feria que se hizo, que fue ExpoAgro, empezó a aparecer el crédito”, repasó Giai Levra, y lamentó que a los pocos días tuvieron que cerrar la planta agrometalúrgica por la pandemia y la cuarentena general, por lo que a la complicación existente se sumó una nueva y debieron “recurrir a créditos para poder terminar de pagar sueldos y cumplir con las obligaciones”.
A partir de ahí, explicó, comenzaron a trabajar cuando el sector pasó a ser considerado esencial y pudieron reabrir, aunque tuvieron que “volver a parar por falta de insumos”. Sin embargo “desde mayo las expectativas mejoraron y se comenzaron a mover las ventas de manera importante”, expresó.
Apuntó que estiman “cerrar el año con dos mil tractores vendidos, y algunos menos entregados por las complicaciones de la emergencia sanitaria”, pero marcó satisfacción porque cuentan con “empleo pleno, incluso incorporando personal, se generó más trabajo a terceros, y la mayoría de los operarios está haciendo horas extras”.
“Dentro de todo, el sector de la maquinaria agrícola es un sector privilegiado, en el marco general, donde otros sectores se vieron muy perjudicados y difíciles de sostener. Gracias a Dios hemos tenido la posibilidad de trabajar y de colocar productos ya que el agro no paró nunca, después de dos años de desinversión, teniendo créditos a tasas razonables, el hombre de campo ha decidido invertir”, comentó.
En relación a la emergencia sanitaria por el Covid-19, Giai Levra aseguró que se aplican estrictamente los protocolos, se ha reforzado el servicio médico dentro de la planta y se incorporó personal en un área específica, que sumó asistencia psicológica: “Dentro de la fábrica es muy difícil que se contagien, excepto que violen las reglamentaciones, que lamentablemente sucede, pero vemos que la gente usa el barbijo, hemos pedido que no se junten a desayunar o tomar mates, pero afuera no se puede controlar lo que hacen, y en casos de aislamiento, trae consecuencias directas a las líneas de producción: por ejemplo, la semana pasada en la fundición solo se pudo fundir un día”, subrayó.
Remarcó que se aplican sanciones con quienes no respetan las normas sanitarias para cuidarse y cuidar a los demás: “No estamos en un jardín de infantes, nosotros en 100 personas pagamos 8 millones de pesos improductivos, y hay que juntarlos, de manera que pedimos total responsabilidad, tenemos que ser conscientes de cada actitud nuestra repercute en todos”.
Todos los años la empresa cierra en el mes de enero por vacaciones, aunque “esto todavía no está decidido”, ya que consideró que “es un año atípico para que la gente pueda disponer de viajar, no sólo por la situación de pandemia, sino también por el encarecimiento del costo de vida”. “También estamos observando que si hay un trabajo hay que aprovecharlo. No sabemos lo que va a pasar el mes que viene, no estamos en condiciones de rechazar trabajos, tratamos de tomar todo lo que se pueda, pero debemos acercar la venta a la producción, es decir la gente que compra quiere la máquina y no nos podemos ir muy lejos en la entrega. Además por el nivel de inflación, que hace muy difícil cerrar un precio a futuro”, se explayó.
Por otro lado, se refirió a cómo impacta la cotización del dólar en el país, aclaró que si bien tuvo variaciones, toman el precio oficial “más allá de que muchos quieren cobrar en el blue”. “Si nosotros importamos motores, lo hacemos a 85 pesos, es el que forma precios, el que trabaje en blanco usa ese dólar, y si bien ha aumentado alrededor de un 30%, ha sido de manera escalonada, que nos permitió ir acomodándonos…”. En cuanto a las perspectivas para los próximos meses, Giai Levra dijo que “los precios para el hombre de campo se presentan muy buenos, y habiendo crédito la gente invierte en maquinaria nueva. Por eso las fábricas metalmecánicas de Las Varillas están todas trabajando muy bien”, pero aclaró que “hay que ser precavido al hablar de ‘bonanza’ cuando hay otros sectores que la están pasando muy mal o incluso cerraron”.
Fuente: El Diario