El Instituto de Virología José María Vanella de la UNC detectó restos de variante Delta en aguas residuales.
Estas muestras fueron tomadas la semana pasada en la planta de tratamiento de líquidos cloacales de Bajo Grande, a 25 kilómetros de Córdoba Capital.
En principio, el hallazgo de variante Delta en estas muestras parecía abrir la posibilidad de que la cepa ya tenga algún nivel de circulación comunitaria en Córdoba. Pese a esto, los expertos intentan llevar tranquilidad.
De este modo, desde el Ministerio de Salúd de la Provincia señalaron que “se están analizando todos los datos”. Además, indicaron: “cuando tengamos alguna conclusión lo informaremos”.
Por otra parte, el médico infectólogo Hugo Pizzi confirmó el hallazgo. Al mismo tiempo, advirtió que encontrar esos restos no significa necesariamente que estemos frente a una posible “explosión epidemiológica”.
Además indicó, la variante Delta en Córdoba “está controlada” gracias al trabajo “codo a codo” entre la universidad, la municipalidad y la provincia.
Pizzi sostuvo: “Es algo para tener muy en cuenta, pero no es una preocupación mayúscula por el momento”. Y finalizó diciendo que es incluso algo lógico el hallazgo “porque el virus se elimina por materia fecal”.
Mientras tanto, en Córdoba ya hay 78 casos de variante Delta detectados. Algunos de esos no tienen nexo epidemiológico. Además, la cepa ya provocó dos muertes: la del caso cero, un viajero que llegó desde Perú; y la de una mujer que fue contacto estrecho de este hombre.