Andrea Rojas, es una mujer trans a la que no le permitían ser madrina en el bautismo de su sobrino nieto en la Parroquia Inmaculado Corazón de María en Pozo del Molle

En diálogo con AM 930 sostuvo que fue un acto de “discriminación”, ya que en su DNI figura como sexo femenino y el único requisito que les pedían desde la iglesia era que uno de los padrinos haya realizado la confirmación. De acuerdo a lo relatado por la mujer, el padrino del niño tiene el sacramento realizado.
“Antes del bautismo, me llamó la colaboradora de la parroquia y me dijo que en los registros, hace 38 años atrás hice la confirmación con mi otro nombre y no podía poner un nombre nuevo, sino había que buscar otra madrina”, explicó.
Rojas contó que también dialogó con el intendente de la localidad y luego con el sacerdote, quien le indicó que “no había ningún problema”. Sin embargo, horas después le confirmó que desde el obispado de Villa María “le iban a tirar las orejas”.

En la búsqueda incansable de la mujer por querer ser la madrina del niño ante los ojos de Dios, llamó al obispado de la ciudad, pero no pudo comunicarse con el Obispo y la secretaria le dijo que no habría problema si lo realizaban.
Entre la angustia de la familia ante lo acontecido, la celebración estuvo a punto de suspenderse.
Sin embargo, Rojas cumplió el rol de madrina, aunque en el certificado figura que el niño tiene solo un padrino.