Mujeres españolas denunciaron que sienten pinchazos en boliches. Luego, las víctimas comienzan a sentir mareos y somnolencia.
Al parecer, se trata de una moda que comenzó en el Reino Unido hace poco más de un año, luego continuó en Francia y recientemente llegó a España.
Ya son más de 30 las denuncias en todo el territorio español.
Estos intentos de sumisión química se suelen relacionar con la burundanga, GHB y el Flunitrazepam, pero en los casos denunciados solo representan un 3%. La sustancia que más predomina es la del alcohol.
Se continuará investigando para llegar con el paradero de los autores, así como también con las intenciones, ya que no es el primer paso para un acto de mayor gravedad.