Frente al final del año legislativo, sin lograr el tratamiento para modificar dos artículos de la Ley 10.406, los intendentes se rearman y repudiaron “el ninguneo y el manoseo”, mientras esperan el llamado a elecciones provinciales sea en mayo y abra una posibilidad más para poner en agenda el tema

 “Fortuna y Arduh son los que llaman, mientras que algunos de los intendentes,  como Alcalino y Delbono, empujan desde el grupo por este tema. Negri y Mestre, los que no aflojan, Rossi, etcétera”.

La frase da cuenta de las últimas tratativas por la re reelección para un tercer mandato consecutivo, que quedaron truncas en el período legislativo de este año. Los intendentes que buscaban acceder a una gestión más al frente de las administraciones municipales, a partir de la modificación de artículos de la nueva ley que limita la misma en la provincia de Córdoba, todavía guardan una alternativa.

Francisco Fortuna (Hacemos por Córdoba), Orlando Arduh (Juntos por el Cambio), son dos de las cartas a las que apuestan los optimistas, mientras que los radicales Mario Negri y Ramón Mestre, más Dante Rossi, se oponen a lo solicitado por quienes intentan retener intendencias, Pablo Alcalino en Arroyo Cabral y Daniel Delbono en Pasco, dos de los que representan a unos 250 pares.

Si bien, el tema de la re reelección no entró en la agenda de la Unicameral, no lo incluyeron a pesar de gestiones, reuniones de pasillos y notas a cada uno de los despachos de los jefes de bloques, no se trató.

Sin embargo, los mandatarios no se quedan con esa negativa y renovarán impulso para 2023: “Queda una chance en febrero”. De todas maneras, “muchos preparan a uno de los suyos por las dudas, sobre todo aquellos que, de acuerdo a los últimos comicios y proyecciones, llegarían de manera ajustada a imponerse en las urnas”.

Por lo bajo, aseguran que “el tema fue jugar al desgaste y molestó el ninguneo”. “En los pasillos, el oficialismo dijo a viva voz que salía y ni lo pusieron en el orden del día”, añadieron.

Está claro que todavía no se van a entregar, pero cesaron las negociaciones, y admiten que “todo depende de Juan (Schiaretti) y su proyección nacional”. Por eso, insisten en que “será una lucha a dar”, aunque admiten que “el tema es que la discusión no está en la gente”, y que si bien en muchos municipios aparecen sucesores o postulantes, casi de manera natural, en otras localidades esa situación no se da ni por asomo. 

La espera recién comienza y la mira está puesta en la fecha de elecciones provinciales, las que debe convocar el gobernador y debe estar separada de las municipales donde rige la Ley 8.102, lo que sustenta la posibilidad de tratamiento legislativo en febrero si al llamado lo hiciera para mayo (como en 2019) y 180 días antes de finalizar su mandato.

En ese mismo contexto, advierten que, sin fecha de comicios provinciales, “se haría una campaña larga”.