Las imágenes se viralizaron en internet, donde abundaron las teorías sobre un fenómeno que parece tener una explicación mucho más sencilla.
Una misteriosa “lluvia de gusanos” cayó sobre China y generó una ola de comentarios en las redes sociales.
Varios videos que se viralizaron en las redes sociales muestran algunos vehículos cubiertos por cientos de estos animales invertebrados en Beijing.
Los usuarios comenzaron a tejer distintas teorías, algunas más disparatadas que otras. A las advertencias de un inminente “apocalipsis” siguieron otras que aludían a una “Luna llena del Gusano”, la última luna llena del invierno del hemisferio norte.
Nadie sabe a ciencia cierta que sucedió en China. El misterio sigue flotando días después de la viralización de las imágenes y más aún en medio de un hermetismo absoluto en las autoridades.
A pesar de la extrañeza del mundo entero, ninguna autoridad en China ha dado explicaciones aun sobre la razón de este fenómeno, lo que dio pie a diversas teorías, un poco más acertadas y no conspiranoicas.
Algunas personas en redes sociales creen que estos animales cayeron de algún edificio cercano al lugar que podría estar infestado de estos bichos.
Otra teoría dice que fueron arrastrados a causa de un torbellino de viento, el cual, al perder fuerza, fue que dejó caer estos gusanos del cielo, dando el aspecto de una imagen apocalíptica.
Por su parte, la revista científica Mother Nature Network también dice que este tipo de incidentes con animales se produce luego de una tormenta o tornado; los científicos creen que estos bichos son arrastrados a kilómetros de distancia de su lugar de origen, algo similar a lo que plantean algunos internautas.
Una de las hipótesis señala que estos “gusanos” en realidad son flores de álamo, que estar llenas de semillas y cuando caen parecen orugas.
En los últimos días, hubo fuertes lluvias en la capital china. Y en medio de la tormenta podrían haber caído flores mojadas que quedaron virtualmente pegadas a los autos, dando la sensación de que se trataría de gusanos.