«Hay que esperar que la manga se asiente y controlarla cuando se den las condiciones», dijo Héctor Medina, coordinador de Contingencias y Emergencias de Senasa
Una invasión de langostas se desató esta semana en el Valle de Punilla y en la zona de Sierras Chicas en la provincia de Córdoba. Por la tarde de este viernes, el fenómeno también se registró en distintos barrios de la ciudad de Córdoba.
Según Marcos Blanda, secretario de Agricultura y Recursos Naturales de Córdoba, estas langostas provienen de las provincias de Catamarca y La Rioja, y su desplazamiento podría estar relacionado con cambios en los vientos y la disponibilidad de alimento.
Según explicó, las dos mangas pernoctaron en el dique La Quebrada y en el dique San Roque. Los vientos del norte hacia al sur hizo que se desplazaran hacia la zona de Malagueño y luego a Bouwer, pero al rotar el viento sur hizo que pasen por la ciudad de Córdoba, según explicó. La manga que estaba en el norte a la altura de Unquillo y Mendiolaza, en cambio, ahora se desplaza hacia el norte.
A pesar de la magnitud de la plaga, vista en videos donde se observa a miles de estos insectos, Blanda subrayó que «sólo se alimentan de plantas, no son vectores de enfermedades y no representan un peligro directo para los humanos ni animales». Además, destacó que las zonas urbanas no son su hábitat natural, por lo que «intentan alejarse rápidamente de los centros urbanos».