Alta Gracia se prepara para declarar la emergencia hídrica ante la sequía extrema
Toda la región central del país enfrenta una sequía extrema que ya se extiende por tres años. En Córdoba, los ríos y diques alcanzan mínimos históricos, y los pronósticos auguran un verano desafiante para la provincia.
En Alta Gracia, el intendente Marcos Torres Lima expresó su preocupación por la situación del río Anisacate, que muestra niveles de agua alarmantes para esta época del año.
El río ha dejado de fluir sobre el murallón, lo que indica una baja drástica comparada con los promedios históricos. «En cualquier momento, ese afluente dejará de proveernos de agua», advirtió el intendente.
Tomar medidas preventivas
Para enfrentar la crisis, se ha presentado un proyecto ante el Consejo Deliberante para declarar la emergencia hídrica.
Este incluirá campañas de concientización, así como sanciones para quienes continúen con prácticas de derroche, como regar, lavar autos o veredas. Torres Lima destacó que el objetivo es anticiparse a la falta de agua, ya que el año pasado la medida se tomó más tarde, con menos agua disponible.
Mientras se espera la declaración formal de la emergencia, inspectores ambientales ya notifican a los vecinos que desperdician agua.
«La mayoría de la ciudadanía es consciente y solidaria», afirmó el intendente, resaltando que muchos vecinos colaboran reportando casos de despilfarro.
Con este panorama, Alta Gracia se prepara para un verano crítico, donde la gestión del agua será clave para sobrellevar la sequía.