El pez diablo negro apareció en la superficie y murió horas después
Un hecho inédito sorprendió a los biólogos marinos en Canarias: el pez diablo negro (Melanocetus Johnsonii), una rara criatura de las profundidades, fue avistado a plena luz del día en una playa de Tenerife.
Este depredador abisal, también conocido como rape abisal, habita entre los 200 y 2.000 metros de profundidad, por lo que su presencia en la superficie generó asombro.
Sin embargo, pocas horas después del hallazgo, el ejemplar murió.
Posibles causas de su muerte
Los expertos creen que su aparición fuera de su hábitat se debió a factores como cambios en las corrientes oceánicas, condiciones ambientales adversas o una enfermedad que lo debilitó.
Tras su fallecimiento, el cuerpo del pez diablo negro fue trasladado al Museo de Naturaleza y Arqueología de Santa Cruz de Tenerife, donde será analizado para conocer más sobre esta misteriosa especie.
Un depredador con bioluminiscencia
El pez diablo negro se distingue por su aspecto aterrador: piel oscura, colmillos afilados y un apéndice bioluminiscente en su cabeza, que utiliza para atraer a sus presas mediante bacterias simbióticas que generan luz.
El descubrimiento de este ejemplar representa una oportunidad única para estudiar una de las criaturas más desconocidas del océano.