El fenómeno astronómico del Eclipse de Luna fue observado en Argentina y diversas partes del mundo, destacando la belleza de nuestro satélite natural teñido de rojo.
Durante la madrugada del 14 de marzo, aficionados a la astronomía en Argentina presenciaron el espectáculo celestial mientras la Luna adquiría un tono rojizo. En América Latina, el eclipse lunar total pudo ser observado sin la necesidad de telescopios u otros instrumentos especializados.
Un eclipse lunar total se produce cuando el Sol, la Tierra y la Luna se alinean de manera que nuestro satélite queda completamente inmerso en la sombra proyectada por nuestro planeta. En esta alineación, la luz solar refractada por la atmósfera terrestre tiñe la Luna de un color rojo característico, transformándola en una «Luna de Sangre».
La última Luna de Sangre visible en el continente ocurrió hace tres años, convirtiendo esta noche en una cita imperdible para los entusiastas de la observación astronómica. En diferentes países, la Luna mostró su mejor cara en distintos momentos de la noche, desde Argentina, Brasil y Chile hasta México y Honduras.