Los movimientos sociales vinculados al peronismo y agrupados en La Unión Trabajadores de la Economía Popular, preparan una masiva marcha y concentración en Plaza de Mayo el 7 de agosto, día de San Cayetano
La movilización se realiza desde el 2016, fecha en que gobernaba Mauricio Macri. Fue un domingo. En esa oportunidad marcharon desde el Santuario del patrono del “pan y el trabajo”, ubicado en el barrio porteño de Liniers, más de trescientas mil personas.
Fue un acto de fe y de reclamo a las políticas del gobierno. Este 2025 se espera reeditar el evento con igual o más fuerza. Aún no está definido si el destino final será en Plaza de Mayo -como suele ocurrir- o en Congreso. Es la primera vez que la peregrinación religiosa, pero con ineludible expresión política, se realiza sin la bendición del Papa Francisco desde Roma.
Jorge Bergoglio enviaba vídeos de salutaciones y expresiones de misericordia. “Tierra, Techo y Trabajo son derechos sagrados. Para algunos resulto ser un Papa comunista. El amor a los pobres está al centro del Evangelio. Reclamar esto no es nada raro, es la Doctrina Social de la Iglesia”, les escribió Francisco y exhortó: “¡Los pobres no sólo padecen la injusticia, sino que también luchan contra ella!”.
“La próxima marcha de San Cayetano, la novena consecutiva, expresa a los descamisados del siglo XXI: los trabajadores y trabajadoras de la economía popular y todos los trabajadores en general, un día que tiene una importancia especial para nosotros ya que es el primer 7 de agosto sin Francisco”, remarca la gacetilla a la convocatoria de la UTEP.
Anclado en los temas sociales, las consignas de este año son más amplias. Los organizadores intentarán articular los reclamos de todos los sectores que se manifiestan contra las políticas sociales y económicas de la administración de Javier Milei. “Será una jornada amplia”, explicaron desde la UTEP, encabezada por su secretario general, Alejandro “Peluca” Gramajo.