El Gobierno venezolano calificó como “agresión extravagante” la advertencia de Estados Unidos sobre un cierre total del espacio aéreo. La administración de Nicolás Maduro sostuvo que la medida viola la soberanía territorial y normas internacionales.

Venezuela rechazó la intención de Estados Unidos de imponer restricciones al uso de su espacio aéreo, luego de que el presidente Donald Trump anunciara un “cierre total” sobre el territorio venezolano y sus alrededores. El Gobierno de Nicolás Maduro calificó la advertencia como una “agresión extravagante” y acusó a Washington de intentar aplicar de manera extraterritorial su jurisdicción.
El pronunciamiento ocurrió después de que Trump publicara un mensaje dirigido a aerolíneas, pilotos, narcotraficantes y traficantes de personas, recomendando evitar el espacio aéreo venezolano. Además, el mandatario estadounidense mantuvo una conversación telefónica con Maduro en la que advirtió que multiplicaría las acciones militares si no abandona Caracas. Según la administración estadounidense, en el diálogo también participó el secretario de Estado y consejero de Seguridad Nacional, Marco Rubio.
Venezuela sostuvo que estas declaraciones implican una amenaza de uso de la fuerza, prohibida por la Carta de la ONU, y contravienen el Convenio de Chicago de 1944, que reconoce la soberanía exclusiva de cada Estado sobre su espacio aéreo. También señaló que la decisión estadounidense afecta los vuelos de repatriación de migrantes venezolanos deportados.
El Gobierno de Maduro pidió a la comunidad internacional rechazar lo que considera una injerencia y una amenaza a la estabilidad del Caribe y el norte de Sudamérica. El episodio ocurre en un contexto de creciente tensión bilateral, marcado por el despliegue militar estadounidense en la región.




