Ayer, domingo 27, por la tarde noche se llevó a cabo un evento de fin de año en el S.U.M Santiago Temple, en el que el baile y la música fueron los elementos protagonistas a celebrar.
Se trata del cierre de año de la Escuela Municipal de Danzas Folklóricas de Santiago Temple, en donde hubo danza y canto.
Entre los artistas que participaron estaban Luciano Ullua, de Piquillin, los Cantores del Pueblo de Luque, Magalí Gómez junto a su padre Coco Gómez, de Santiago Temple y Las Voces de Madrugada de Tránsito.
Y entre los protagonistas estaba el Centro de Jubilados Donato Monina, quienes demostraron su danzar.
En conversación con Hechos, Rocio Ferreyra y Miguel Crepin, profesores y organizadores del evento, comentaron sobre la trayectoria que debieron atravesar desde marzo hasta la posibilidad de realizar el cierre del año: “Hemos comenzado en marzo las clases de folklore y tuvimos que parar a mediados del mes por la pandemia. Durante los meses que estuvimos en aislamiento nos manejamos con clases virtuales hasta julio, ya que se complicó el hecho de interpretar las danzas y los videos no eran lo mismo que lo presencial”.
En este marco agregaron: “Esperamos hasta noviembre para retomar la presencialidad, durante esos meses presentamos un proyecto a la municipalidad que incluye todas las actividades culturales que podrían, haber, que incluyen folklore, tango, y malambo. Fue aprobado el proyecto de folklore y desde el seis de noviembre tuvimos clases en el S.U.M de la mano de la Municipalidad. Fueron solo dos meses de ensayo e hicimos el cierre de la academia con la aprobación del intendente para que haya público para despedir bien el año”.
Por último, en relación al año próximo y los proyectos a futuro, Ferreyra y Crespin comentaron: “La idea desde la Municipalidad, al haber estado 10 meses sin actividad, es continuar sin vacaciones en el verano. Es muy probable que la primera semana de este año nuevo retomemos los ensayos”.
“Y si es posible, hacer un cierre de vuelta el año que viene y si vuelven los festivales, las peñas, salir a bailar un poco. Lo ideal sería que el año esté más completo de eventos”, añadieron.
Protocolos
Aquellos que asistieron a la celebración debieron asistir con su propia mesa y reposeras, además de cumplir con las medidas sanitarias de permanecer en una misma zona, no compartir utensilios, el uso de barbijos y mantener la distancia social.
“Lo principal era que la gente mantuviera el distanciamiento social. Se implementaron espacios burbuja y las familias colaboraron respetando sus espacios”, comentaron.
Entre los otros cuidados, en los baños había alcohol en gel y las personas del buffet estuvieron con barbijos.
Fuente: Hechos Media Santiago Temple.
Fotos: Gentileza de Claudia Alejandra Aguirre.