La industria argentina del cannabis se puso oficialmente en marcha. Desde el Ministerio de Economía Nacional, el titular de la cartera, Sergio Massa, junto a varios de sus pares del Gabinete, presentó formalmente la creación de la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y el Cannabis Medicinal (ARICCAME) y la presentación de sus autoridades

En el contexto del lanzamiento de la Mesa de Trabajo de ARICCAME, el principal anuncio fue una política de alivio fiscal para los productores que obtengan la licencia, expedida justamente por la Agencia.
Durante el acto, que se transmitió con un vivo de Instagram de la cuenta de Economía, estuvo la ministra de Salud, Carla Vizzotti, además de Aníbal Fernández, por Seguridad; Daniel Filmus, de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva; y el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo. Se presentó oficialmente al presidente de la Agencia, Francisco Echarren, intendente de la ciudad bonaerense de Castelli.
“Está muy metido y muy interesado en el cannabis”, comentó una fuente del Gobierno sobre la expectativa del ministro Massa en relación el potencial que representa esta nueva industria en el país, basada en una planta cuyos usos industriales y terapéuticos fueron fundamentales a lo largo de la historia de la humanidad y sin embargo, paradójicamente, sigue prohibida por la ley de drogas 23.737.
La Agencia Nacional de Cannabis regulará la cadena de producción, comercialización nacional y explotación de la planta de cannabis, su semilla y sus productos derivados para uso medicinal. Con las diversas partes de la cannabis sativa (sus hojas, sus flores, su tallo, sus semillas) se pueden fabricar alimentos, materiales de construcción, telas, cosméticos, entre muchos otros productos.
A su vez, desde la Agencia se extenderán licencias y habilitaciones, y será la encargada de impulsar desde todos los ángulos el desarrollo de esta esta nueva industria. Massa pretende que la planta de cannabis aporte a la economía nacional con la generación de “trabajo genuino, de calidad, y joven”.
Otra de las ideas iniciales es hacer una “ventanilla única” que les simplifique la burocracia de los trámites a los pequeños productores y cooperativas, especialmente los que trabajen en las provincias del llamado interior del país.
Desde Economía prometen que la ARICCAME apoyará y fomentará a emprendimientos, pymes y pequeños productores del flamante sector. “Actualmente existen 45 proyectos de desarrollo de cannabis en la Argentina que generarán 5.000 puestos de trabajo en el primer año de implementación y dinamizarán a las economías regionales”, detallaron.
Las especificaciones sobre cómo tramitar la apertura de nuevas industrias cannábicas vendrán con el desarrollo de la reglamentación de la ley, sancionada en mayo del año pasado, una de las primeras tareas de Francisco Echarren al frente de la ARICCAME