Todo ocurrió cuando los peritos llegaron a una escena del crimen donde las condiciones de seguridad no estaban dadas. Ahora, reclaman que sus tareas sean declaradas insalubres.

Por la mañana del miércoles 1 de febrero, los trabajadores de la Policía Judicial mantuvieron una asamblea para discutir sobre mejores condiciones laborales luego de encontrarse en medio de una balacera cuando llegaron a trabajar.
Seis trabajadores pertenecientes al cuerpo de la policía judicial de Córdoba, fueron víctimas de amenazas y de una balacera. La tremenda secuela tuvo lugar el jueves 26 de enero cuando acudieron al barrio Ciudad de los Cuartetos para recolectar pruebas en el marco de un homicidio, encomendados por la fiscalía.
Afortunadamente, las victimas involucradas en el caso pudieron esconderse en el garage de una vivienda y no sufrieron heridas.
En este marco, Ernesto Ortíz, delegado de los trabajadores, expresó que tienen “preocupación, angustia y sobre todo mucha bronca” por esta situación.
“Nuestros compañeros y compañeras fueron víctimas de una balacera donde se efectuaron más de 50 disparos. Tuvieron que hacer cuerpo a tierra porque no tuvieron seguridad por parte de la Policía de Córdoba, ni de la Guardia de Infantería ni de ninguna otra fuerza de seguridad”, dijo.
Si bien los trabajadores judiciales pudieron volver a sus instalaciones, Ortíz aseguró que allí “No recibieron ninguna contención psicológica, teniendo que terminar su guardia pese a haber sufrido un hecho de estas características”.
Tras el terrible hecho, el cuerpo de delegados y el gremio de Judiciales realizó una asamblea exigiendo la implementación de la Oficina de Medicina Preventiva, donde se puede brindar contención psicológica, que ya fue sancionada hace 11 años.
Por otro lado, también reclamaron que “se reactive el expediente de insalubridad, paralizado hace más de un año en el Ministerio de Trabajo”.
“Nosotros llevamos adelante una tarea que todos los días estamos en contacto con la violencia, con los hechos delictivos, con lo peor de la sociedad cordobesa. Eso tiene un impacto muy negativo sobre nuestra estructura mental, sobre nuestros vínculos, sobre nuestras familias y por eso estamos reclamando y exigiendo la declaración de la insalubridad”, cerró el delegado.