El jefe de gabinete, Nicolás Posse; el ministro del Interior, Guillermo Francos; y el secretario de Trabajo, Julio Cordero, mantuvieron ayer en Casa Rosada la primera reunión con la Confederación General del Trabajo (CGT) desde que Javier Milei asumió la presidencia en diciembre pasado.
No obstante, el Gobierno aclaró que «no se homologarán paritarias por encima de la inflación», en lo que fue el punto más crítico del encuentro.
El encuentro comenzó a las 17 y por la CGT estaban presentes Héctor Daer (Sanidad) y Carlos Acuña (SOESGyPE); el secretario general de FEDCAM, Hugo Moyano, y los siguientes integrantes del consejo directivo nacional de la central obrera: Andrés Rodríguez (UPCN); Gerardo Martínez (UOCRA); José Luis Lingeri (Obras Sanitarias); Marina Jaureguiberry (SADOP); Cristian Jerónimo (Empleados del Vidrio); Susana Benítez (SATSAID); Jorge Sola (Seguros); y Oscar Rojas (Maestranza). También participó de la cita el secretario de Interior, Lisandro Catalán.
La homologación de paritarias, en especial la de Camioneros -en pleno conflicto con la administración libertaria- formó parte también del menú despegado en la mesa de la Casa Rosada. Y la cúpula de la CGT se llevó una negativa por parte de los funcionarios nacionales, el punto más caliente del encuentro.
“Junto al jefe de gabinete y el secretario de Trabajo mantuvimos un encuentro con los secretarios generales de la CGT y dirigentes de múltiples entidades gremiales. En línea con las reuniones mantenidas con legisladores, gobernadores y dirigentes, seguimos dialogando con todos los sectores y trabajando para la construcción de consensos que nos permitan llevar adelante las reformas que necesita la Argentina”, señaló Francos tras la reunión.