La provincia de Salta reconoció oficialmente su responsabilidad sobre los pozos que continúan emanando gases tóxicos en el norte. El reconocimiento marca un hito, pero el riesgo ambiental persiste.

La provincia de Salta asumió formalmente su responsabilidad sobre los pozos que continúan emanando gases en el norte provincial. La decisión se produjo tras años de reclamos de organizaciones y comunidades que denuncian un grave impacto ambiental y sanitario en la zona.
A pesar del reconocimiento, los pozos siguen activos y representando un riesgo para la población. Ahora, el gobierno provincial deberá presentar y ejecutar un plan concreto para el cierre definitivo de estas estructuras que permanecen abandonadas desde hace décadas.




